¿Por qué deberías emprender tu propio negocio?

emprender online

¿Pensando en emprender tu propio negocio pero te da miedo?. Iniciar tu propio negocio ya sea online o físico es una de las cosas más gratificantes y desafiantes que puedes hacer.

Muchas veces será agotador pero muchas otras será muy emocionante. Si aún no te decides a comenzar tu propio negocio aquí te cuento todo lo que debes saber al respecto.

Para algunas personas, emprender es algo innato. Desde pequeños se les nota desde lejos que están ansiosos por iniciar sus propios proyectos y desarrollar sus ideas.

Sin embargo, no es un proceso sencillo y en la mayoría de los casos las personas se rinden antes de alcanzar sus sueños. Pero, si tienes tu vista fijada en el éxito y te rodeas de las personas correctas, seguro que tú podrás hacerlo.

Si bien iniciar un negocio es un concepto muy intimidante, es estresante, demandante de tu dinero y de tu tiempo. Es sin duda una excelente opción si quieres cambiar de trabajo.

En fin, es todo un compromiso, pero piensa en que ese compromiso lo estás haciendo contigo mismo. Porque los frutos de ese esfuerzo serán sólo para ti.

Razones para emprender

¡No temas! que no es tan malo como crees, ¿no te gustaría ser dueño de tu tiempo y luchar por tus sueños en lugar de los de tu jefe?. Pues, el emprendedor puede hacerlo, en líneas generales las personas se convierten en emprendedores porque buscan:

  • Independencia.
  • Libertad financiera.
  • No trabajar para nadie más.

Por ello, si eres una persona con suficientes conocimientos y habilidades que pueden utilizarse para tu propio benefici. Es el momento de emprender y montar tu negocio.

Actualmente, existen muchas oportunidades de negocio, en especial online y, si no lo intentas ahora, en unos cuantos años podrías arrepentirte.

Claves para emprender tu negocio

Primeramente, debes tener en cuenta que existen diferentes modelos de negocio disponibles para el emprendedor. Aunque, hoy en día con el crecimiento del internet y las redes sociales, es más arriesgado emprender un negocio tradicional que la opción de crear un negocio online.

Claro, si tienes pasión por lo que haces y confías en tu producto, cualquiera de las dos opciones te dará buenos resultados. Ya sea que optes por un negocio online o físico debes tener:

  • Pasión por lo que haces.
  • Una visión clara de lo que quieres conseguir.
  • Conocer al máximo el modelo de negocio.
  • Inversión inicial para montar el negocio.

Beneficios de emprender tu propio negocio

Puede ser, que aún sabiendo esto, no te decides a emprender tu propio negocio. Te entiendo, conlleva bastante trabajo. Por esta razón quiero hablarte de los múltiples beneficios para que te animes a iniciar tu emprendimiento y cumplir tus metas.

Flexibilidad de horario

Primero, y una de las razones principales, es que tú decides cuánto tiempo le dedicas a cada proyecto, y cómo organizas tu horario. Con ello, podrás trabajar en tus sueños las horas que quieras, con la satisfacción de empezar o finalizar a cualquier hora del día.

No obstante, al comenzar con tu empresa, ella demandará todo tu tiempo y tendrás que sacrificar compartir con las personas que más amas. Pero, si te organizas y buscas la ayuda necesaria puedes sacarle el mayor provecho a cada minuto.

Tener tu propia empresa, también te da la oportunidad de establecerte en cualquier lugar. Y, dependiendo de tu especialidad, incluso podrás trabajar desde casa o ¿te imaginas trabajar a la orilla de la playa?

Te conviertes en tu propio jefe

De manera similar, la posibilidad de ser tu propio jefe es una gran motivación. No tener que aguantar los malos tratos de un jefe, ni lidiar con el estrés de quedar bien o hacer quedar bien a los demás.

Cuando eres emprendedor puedes tomar libremente tus decisiones, sin tener que consultar o esperar la aprobación de nadie.

Por supuesto, esto conlleva una gran responsabilidad, porque eres tú quien dará la cara a los clientes, por lo que el más exigente con tu trabajo, debes ser tú mismo. Tampoco puedes culpar a nadie más de tus errores y, el éxito o fracaso de tu empresa depende de ti.

Lo ideal, es que veas esto más como la oportunidad de poder descubrir tu propia metodología de trabajo y sacar el líder que llevas dentro.

Puedes marcar la diferencia

Desde muy pequeño tenía el sueño de cambiar el mundo ¿también tú?. Pues qué mejor manera de hacerlo que trabajando en lo que amas. Incluso puedes tener tu marca personal o dejar una huella con tu innovador producto o servicio.

No tiene sentido emprender en algo que no te guste, tu motivación principal tiene que ser tu pasión. Y cuando emprendes en tu propio negocio, tienes la oportunidad de hacer lo que realmente te motiva y que pueda ayudar a otros.

Generar nuevos empleos

Asimismo, como emprendedor serás creador de muchos puestos de trabajo, y tus ideas ayudarán a mejorar la calidad de vida de quienes trabajan contigo.

Lo más importante al contratar a alguien, es que esa persona esté realmente apegada a la misión y visión de tu empresa. Así, puedes convertirte en un verdadero líder, cuando tienes objetivos claros y puedes elegir a tus equipos de trabajo, es más fácil triunfar en tu negocio.

Estabilidad laboral

Finalmente, y aunque no lo creas, si estructuras bien tu negocio, realizas estrategias de marketing y tienes bien organizado tu presupuesto. Llegará el momento en el que generes más ingresos que trabajando para otra persona.

Al desarrollar tu idea de emprendimiento, aseguras tu futuro laboral y tu perfil profesional. Así ejarás de depender de terceros que te contraten o que te paguen lo justo por tu trabajo.

No todo lo que brilla es oro

Si bien emprender es una excelente decisión y tiene muchos beneficios, también viene con sus problemas.

En primer lugar, si quieres crear tu propio negocio para trabajar menos, ya te puedes ir olvidando de hacerlo. ¡Muchos de los mejores emprendedores se despiertan a las 4:30 am!

Trabajando para otro, sólo cumples con un horario establecido pero, cuando inicias tu propio negocio hay un sentimiento constante de culpa cuando no estás trabajando y de sentir que cada segundo que no trabajas en hacer crecer tu negocio es un segundo desaprovechado.

En segundo lugar, no tendrás a nadie que te guíe, en el trabajo, generalmente siempre hay un jefe. O alguien por encima que es en última instancia responsable de tu desempeño y productividad.

Por el contrario, cuando comienzas tu propio negocio, no hay un manual. Nadie puede decirte si estás haciendo las cosas bien o no. Tienes que resolverlo todo por ti mismo todos los días, aprenderás poco a poco cómo hacer las cosas. El error será tu mejor maestro.

También, te recomiendo contar con suficientes ahorros para cubrir tus facturas cuando comiences un negocio. Ya que al principio, es posible que no recibas un salario. Esto, mientras tu empresa se consolida y vas recuperando el capital invertido.

En este punto debes ser muy consciente de que tu negocio podría no generar el dinero que esperabas. Incluso podría no funcionar para nada y perder tu inversión. Evita estas situaciones y asesórate muy bien antes de dejar tu trabajo para perseguir tu sueño.

Presión emocional

De igual forma, al emprender nunca tienes la certeza de si estás haciendo las cosas bien. Cada acción que realizas es en esencia un riesgo. Algo que consideras la mejor opción posible pero de lo que no tienes total certeza.

Esto puede resultar muy frustrante, ya que puedes gastar tiempo y dinero en una iniciativa, solo para descubrir que fue un desperdicio total. Aunque, a medida que pases más tiempo como propietario de un negocio, tu experiencia crecerá y tus «mejores apuestas» serán más acertadas.

No te desanimes si al principio las cosas no pintan bien. El estrés y el miedo al fracaso pueden ser abrumadores. A pesar de ello, no te detengas y sigue luchando hasta lograr lo que te propones. Te aseguro que todo ello valdrá la pena.