Ayer realicé la Ruta de los Bolos del río Dúrcal en Granada y voy a darte algunos consejos para realizarla de forma correcta sin perderte ya que es algo muy común cuando nunca la has hecho.
La señalización es escasa o nula por lo que ten cuidado.
El Valle de Lecrín es una de las comarcas privilegiadas de la provincia de Granada debido a su agradable clima, su gente y sus paisajes de postal.
Un extenso valle que huele a naranjos y limoneros, un embriagante aroma a azahar que te acompañará por los antiguos molinos de harina, castillos musulmanes y el casco histórico de esta tranquila comarca.
La ruta de los Bolos es una de las mejores excursiones que puedes hacer en verano en la provincia de Granada pues transcurre por el río Dúrcal, lo que es garantía de un paseo tranquilo por un valle, donde además de darte un baño, vas a disfrutar de una vista espectacular y terminar tu paseo en una cascada que te quitará el aliento.
Este paseo es perfecto para los amantes de la aventura, tanto por el hecho de que debes caminar por el cauce del río, como por la parte en que se va junto a la acequia de Márgena.
¿Cómo llegar?
La localidad de Dúrcal, está ubicada a unos 34 kilómetros de Granada. Puedes ir en coche hasta el Instituto Valle de Lecrín. Allí hay un parking muy grande y gratis.
Desde allí tienes dos opciones para comenzar la ruta, una siguiendo las indicaciones que encuentras en “Bolos del Agua” las cuales te llevan a una zona recreativa, y puedes comenzar el recorrido por la parte baja del río.
La otra opción y, la que yo te recomiendo es, estando de frente a la cancela del instituto, tomar un camino de tierra a mano izquierda que va bordeando el instituto. A pocos metros te encontrarás la acequia que debes seguir durante todo el recorrido.
El recorrido
Una vez que encontramos la acequia, seguiremos siempre la dirección que ésta nos marca. Te encontrarás con un primer tramo, el más ancho y quizás el más caluroso, ya que no hay muchos árboles. Si prefieres, este tramo lo puedes hacer en coche, lo puedes dejar junto una caseta de obra, pero ten en cuenta que no es un lugar muy grande, y sólo entran escasamente unos seis vehículos.
Sigues el camino paralelo al valle del río Dúrcal donde el paisaje se va haciendo cada vez más espectacular. En ésta zona te puedes encontrar con algunos bancos, que forman una especie de mirador, para disfrutar del lugar y tomar varias fotos.
Este camino termina en una en unas escaleras de madera por las que debes descender hasta el río. Recuerda que no hay mucha señalización así que ten cuidado donde pisas. Una vez que bajas por las escaleras hasta el río, en la otra orilla te vas a encontrar un estrecho y empinado sendero por el que deberás subir a la acequia.
En ciertas partes de este tramo, el recorrido es bastante estrecho además, en el lateral izquierdo tienes un importante precipicio, por eso lo mejor es ir andando por dentro de la acequia, esta parte es muy divertida, ya que en verano es agua está divina y con el calor del tramo anterior, este cambio de panorama va perfecto.
Pero no te preocupes, que no te encontrarás muchos de estos tramos tan estrechos, la mayoría del tiempo podrás ir a un lado de la acequia teniendo cuidado, ya que ésta siempre será tu guía.
Seguimos nuestro recorrido por los Bolos del Agua y, aquí te encontrás con varios “obstáculos”. Varias cuevas y túneles excavados en la roca y por los que tendrás que pasar metido si o si en la acequia y vaya que es divertido.
La primera cascada
Y así, siguiendo en todo momento la acequia, llegamos a la primera cascada llamada el Salto de Fuga donde puedes ver algunas familias o grupos de excursión haciéndose fotos y descansando un rato.
La cascada, de casi 800 m de altura, está rodeada de un paisaje precioso. Y además del gran salto de agua podemos disfrutar de pequeñas cascadas rodeadas de abundante vegetación.
Hasta este punto habrán pasado de 45 minutos a una hora dependiendo del ritmo del paso.
Aquí, es bueno que pares para comer algo y recuperar el aliento, ya que la segunda cascada de la ruta de los Bolos del Agua es a donde quieres llegar, ésta suele estar más tranquila.
A partir de aquí sólo debes continuar por el cauce del río, a lo largo del camino los sonidos de la naturaleza serán tus acompañantes, pequeños pozos donde podrás refrescarte, y un espectacular paisaje natural formado por las paredes del desfiladero.
En algunos tramos podrás pensar que se terminó el camino, ya que las rocas son cada vez de mayor tamaño, pero con mucho cuidado y algo de ayuda podrás subirlas sin ningún problema y seguir con la ruta.
La meta
En aproximadamente 1h (un poco más si vas despacio) de camino a través del río, llegas al fin a la siguiente y última cascada de tu recorrido. Un salto de agua impresionante que al caer entre las rocas genera un ruido mágico que hace que toda la caminata valga la pena.
En la parte más baja, esta cascada crea pequeños pozo donde te puedes relajar y darte un baño, si tienes suerte puedes estar completamente solo pues esta parte es bastante estrecha y no todo llegan hasta aquí. Ahora sólo te queda el camino de regreso, ya más fresco y libre de estrés.
Importante
- Esta ruta atraviesa el Parque Natural de Sierra Nevada, donde se encuentran especies protegidas o en peligro de extinción, así que ten mucho cuidado si te encuentras alguna.
- No te recomiendo ir en época de invierno pues el agua está muy fría y el caudal crece bastante.
- En algunas parte del camino vas a pasar por zonas estrechas o de peligro de caída, por lo que debes tener mucho cuidado, en especial si vas con niños.
Recomendaciones
- Lleva ropa cómoda, fresca y zapatos deportivos, ten en cuenta que vas a caminar por el río así que ten mucho cuidado con algunas rocas resbaladizas.
- Ten por seguro que te vas a mojar, te recomiendo llevar ropa de baño y dejar otro cambio de ropa para cuando termines el recorrido.
- También lleva agua y algunos dulces o snacks para hacer alguna parada de descanso en el camino.
- Si vas con niños o adultos mayores te recomiendo tomar la ruta que comienza por la parte baja del río.
Como ves, éste es un plan excelente para hacer en fechas veraniegas y huir de calor. Se puede hacer pensando en pasar el día completo en la zona o solo por la tarde.